La fuente de la Sabiduria

“La sabiduría de Dios soluciona lo que no puede la inteligencia humana”. 

 

Cuan hermoso es encontrar en Dios sabiduría y conocimientos insuperables e infinitos.  La belleza de Dios está en Su carácter y en que cada uno de ellos se complementa entre sí. Sabemos que Dios es omnipotente, omnisciente y bondadoso. Pero, si hay algo que nos enseña las escrituras sobre Dios es que Él es sabio.

 

En este tiempo hay  dos puntos que te quiero enseñar sobre Dios y la sabiduría: Dios es completamente e infinitamente sabio y es superior a la sabiduría que nosotros podamos poseer.

 

1. La palabra de Dios nos dice “Con Dios está  la sabiduría y el poder; suyo es el consejo y la inteligencia” (Job 12:13).

 

2. Dios es la fuente de la sabiduría.

 

La sabiduría  no es un producto de nuestras experiencias. La sabiduría no está en nosotros. La palabra es muy clara al decirnos de dónde proviene la sabiduría.

 

Proverbios 2:6 nos dice lo siguiente: “Porque el Señor da sabiduría, De Su boca vienen el conocimiento y la inteligencia”. Él es quien la da, porque Él es la sabiduría.

 

Es importante saber que no podemos tenerla sin ir a la fuente de la misma.

 

Ahora mi pregunta para ti es: ¿Crees que Jesús es la misma Sabiduría de que habla el Libro de Proverbios?

 

Proverbios 8  es una pieza clave para poder comprender el concepto de la sabiduría de manera bíblica. Ciertamente Jesús es la misma sabiduría la cual se manifiesta en cada uno de nosotros. Él es la sabiduría en persona la cual se manifiesta desde la creación. La cual Salomón hace referencia como si ella fuera una mujer noble, bella y servicial.

 

En pocas palabras, Jesús revela la “sabiduría” procedente de Dios.  Sus enseñanzas, milagros y su modo de vida manifestaron la sabiduría de Dios en Su vida, muerte y resurrección.

 

Quiero concluir diciéndote que necesitamos la fuente que es Cristo para que El entre en nuestros corazones para que Su sabiduría se manifieste en cada uno de uno de nosotros. Porque en la vida no es suficiente tener inteligencia o conocimiento sino la sabiduría que proviene de Dios.

 

¡Dios te bendiga!

Laura Darley de Mena